Todos al llegar la temporada de verano nos vamos a la casita de campo de la familia, para disfrutar de la naturaleza, dela aire fresco, de la buena comida y de la paz del campo. Pero al poco tiempo de llegar, nos encontramos con que teníamos unas nuevas, inesperadas e indeseables compañeras de residencia, la carcoma. Al principio no sabíamos que eran aquellos bichitos que de repente aparecían en los muebles, las paredes, las cortinas y las alfombras. Pero buscando en internet vimos que se trataba de carcoma. No nos lo podíamos creer… ¿Tendríamos ahora que deshacernos de todo el mobiliario del hogar? Menuda faena, si era así…
Afortunadamente pudimos contar con los servicios de Control Plag, Sanidad Amiental, especialistas en control de plagas, y formado de un grupo humano se caracteriza por una rigurosa seriedad, eficacia y puntualidad en todos sus trabajos. Ha sido una suerte el poder contar con un equipo tan cualificado, y de la carcoma no ha quedado ni rastro.
Estos insectos son frecuentes en las casas rurales y pueden vivir en la madera durante años. Los factores que favorecen la aparición de la carcoma son, madera, la humedad y una temperatura de unos 20-25ºC. Estas condiciones son las más propicias para la aparición de una plaga. La carcoma se introduce en la madera, deposita sus huevos y cuando la temperatura sube o baja de la temperatura mencionada anteriormente, salen volando de su escondite para reproducirse y volver a empezar con la puesta de huevos.
Hemos leído que aplicando un tratamiento anticarcoma se puede evitar la puesta de huevos, pero antes debemos asegurarnos los posibles agujeros donde la carcoma podría depositar sus huevos. El barniz esto remedio para evitar la reproducción de la carcoma, ya que es tóxico para estos insectos. Estos tratamientos hay que aplicarlos de manera regular.
Existen algunos remedios caseros para eliminar la carcoma, como la congelación y la posterior aplicación de insecticidas sobre los muebles, que taparemos con un plástico, durante un mínimo de 15 días. Pero para curarse en salud, es preferible solicitar los servicios de profesionales del sector.
Diferencias entre carcoma y termitas
En muchas ocasiones las personas que conviven con algún tipo de plaga de la madera no son capaces de discernir si se trata de termitas o de carcoma. La cuestión es sencilla cuando los insectos adultos salen al exterior a reproducirse, pero mientras están en el interior de la madera o en estado larvario, no podremos saber de qué bicho se trata.
En apariencia, ambos insectos son diferentes. La carcoma es una especie de escarabajo, mientras que la termita es como una hormiga con alas.
Una de las cosas que delatará que es carcoma y no termita, el bicho que se está comiendo nuestra madera, es el ruido que la primera produce al comer. Las termitas, por el contrario no emiten ningún sonido.
Los excrementos de estos insectos también pueden ayudar a saber con qué nos estamos enfrentado. El excremento de la carcoma es mucho más fino y claro, como una especie de polvillo, mientras que el de la termita es más grande, oscuro y en forma de bolas.