Nos ha tocado vivir en una etapa de la evolución como sociedad en la que cada vez estamos más conectados y recurrimos cada vez más al uso de las nuevas tecnologías para todo. En este sentido, ya no solo trabajamos frente a un ordenador, sino que también realizamos nuestras compras frente a una pantalla o consumimos cada vez más contenidos audiovisuales digitales.
Es por todo ello por lo que la logística se ha convertido en un sector al alza en nuestro país y en la economía global y es que ya apenas vamos a las tiendas de proximidad a comprar lo que necesitamos, sino que buscamos que nos lo lleven a casa. En este sentido, lo mismo ocurre con las empresas, las cuales están cada vez más deslocalizadas y ello provoca que sean dependientes de compañías logísticas como Boyacá, Transportes Gorras, Trasportes Internacionales, Transportes Lemos, Transrolan y tantas otras compañías que ven como su carga de trabajo aumenta año tras año. Y es que no podemos pasar por alto los beneficios de la logística, ya que estos son muchos y muy importantes, sin embargo, algunos de los más relevantes pasan por:
- Mayor control del proceso. Aunque en un primer momento pueda parecer contradictorio, ceder tu logística puede ser el primer paso para tener un mejor control y conocimiento sobre ella. Cuando las empresas destinan recursos muy ajustados para sacar su logística adelante, es raro que además puedan invertir tiempo en obtener sus propios indicadores de rendimiento. Al externalizar el servicio de logística, se puede obtener y analizar todo el big data necesario para que cada compañía pueda mejorar sus procesos.
- Simplificación del cumplimiento normativo. La logística y el transporte son mundos complejos y en constante evolución, por lo que no resulta fácil estar al día con las normativas asociadas. Para los operadores logísticos es mucho más sencillo estar actualizados y ser expertos en las cuestiones legales que les atañen. Delegar parte de esta preocupación reduce las posibilidades de incurrir en faltas.
- Facilidad de acceso a nuevos mercados. La logística es fundamental para que llegues a los puntos de venta. A medida que el recorrido de un producto hasta el cliente final se hace más largo, más necesaria es la ayuda logística, no sólo en términos de transporte, sino que también por la potencial necesidad de contar con centros de distribución de proximidad, nuevos almacenes, etc. Estas necesidades se hacen mucho más fáciles de resolver con la ayuda de una compañía de logística y transporte.
- Más flexibilidad ante los cambios de demanda. La flexibilidad que aporta un operador logístico se traduce de varias maneras. Una de las más importantes es la forma de lidiar con los períodos de estacionalidad, esas fechas del año en que las ventas suben explosivamente o bajan. Estas fluctuaciones pueden significar no dar abasto con el aumento de trabajo, o bien, tener recursos infrautilizados durante los tramos bajos. En este aspecto, los operadores logísticos, aunque también se enfrentan al reto de la estacionalidad, pueden afrontarla de mejor manera, ya que pueden contar con una cartera variada de clientes que tengan diferentes épocas estacionales. Además, son compañías que están acostumbradas a reaccionar frente a estos cambios, por lo que suelen resolverlos contratando proveedores, reclutando personal o incluso alquilando temporalmente nuevas naves, espacios y maquinarias.
- Ahorrar costes. Una de las motivaciones más importantes que tienen las empresas para resolver internamente su logística de transporte, es la creencia de que así ahorrarán costes. No es que sea imposible conseguirlo, pero hay muchos factores que hacen que las empresas de logística y transporte logren una mayor eficiencia de recursos que una compañía de otra índole y consigan, por ende, ofrecer un mejor coste final a sus clientes. En este sentido, la economía de escala, la flexibilidad, los períodos estacionales, la liberación de recursos internos y económicos o el ahorro en las inversiones a realizar, son puntos que juegan en favor de que la subcontratación sea una buena opción para mejorar, tanto el servicio, como los costes reales.
La logística inversa, otro de los polos de crecimiento de nuestro país
La logística inversa se encarga de la recuperación y reciclaje de envases, embalajes y residuos peligrosos; así como de los procesos de retorno de excesos de inventario, devoluciones de clientes, productos obsoletos e inventarios estacionales. En otras palabras, se trata de una manera de retorno para unos materiales que se reutilizan, reciclan o destruyen. Es por ello por lo que en una industria cada vez más digitalizada y globalizada, este tipo de logística cobra cada vez una mayor presencia en todo el mundo y, como no podía ser menos, en nuestro país.